Jared Leto a pesar de ir de intenso por la vida y de implicarse en algunos proyectos más o menos arriesgados como Requiem por un Sueño o El Club de la Lucha no deja de ser carnaza para las lectoras de Nuevo VALE. Su última proeza ha sido producir y protagonizar Chapter 27 en donde se mete en la piel de Mark David Chapman, el asesino de John Lennon, esta cinta supone el debut de J.P. Schaefer y le acompaña una de mis petardas favoritas la juerguista Lindsay Lohan. Esta cinta se estrenó en el pasado Festival de Sundance y no fue muy bien recibida, de momento no tiene fecha de estreno en Estados Unidos.
Leto tuvo que engordar 30 kilos para interpretar a Chapman, pero lo peor fue la dieta de adelgazamiento a la que se sometió después a base de líquidos, sobre todo zumo de limón por la que llegó a perder diez kilos en tan solo diez días, hasta el punto de diagnosticarle gota por cometer semejante locura.
La revista Purple Magazine muestra la radical transformación de Leto, del actor con 30 kilos más al esqueleto andante con más de 40 kilos perdidos, entre la primera foto y la última han pasado seis meses. Da auténtica grima, perdió tantos kilos no para interpretar un personaje como el de Christian Bale en El Maquinista sino para dar rienda suelta a una de sus habituales locuras.

En su día me encontré con este material de Jared Leto y decidí compartir esta curiosidad con vosotros, para que nos divertiéramos un rato. Mi intención no era insultar a nadie, simplemente comentar una de las habituales extravagancias del protagonista de esta anécdota, si en algún momento alguien se ha sentido ofendido por algunas de las calificaciones que he podido emitir en este texto, os pido sinceramente disculpas. Lo que jamás me llegué a imaginar es que el asunto se desmadrara de la manera en que se ha hecho. En nombre Javier Ruiz de Arcaute, Rafa Martín, Daniel Rayado y en el mío propio pido disculpas por estos incidentes que nos han obligado a cerrar este post a posibles comentarios, medida drástica pero en este caso necesaria porque estaba adquiriéndose un sentido que en absoluto es agradable, no lo es para los lectores habituales o no de esta santa página, ni tampoco lo es para nosotros. Tampoco me es agradable tomar la medida de eliminar todos aquellos mensajes ofensivos que se han emitido en este post, no me considero ni una puritana, ni una conservadora, ni soy partidaria de la censura, pero no me queda más remedio. Si alguien se ha sentido ofendido con la aplicación de estas medidas os pido disculpas. Espero que lo podáis entender. Gracias.