No sé si es que estamos tontos o que hay algún tipo de configuración astral que impide que veamos el talento ante nuestras narices.
El cine español, ese eterno apestado de las carteleras, vive entre el sollozo y el orgullo de “lo nuestro”, pero es que justo cuando parte de eso “nuestro” comienza a dar señales de auténtica salud, nadie se entera. Películas como La Hora Fría, Los Cronocrímenes y ahora El Rey de la Montaña, han sufrido esta extraña maldición. Películas que no es que tengan buenas críticas, que las tienen, o que ganen premios en festivales, que los ganan, sino que al ser de género, con más bombo, hubiesen dado mucho más de sí. Muestra de ello es que Hollywood se fije en ellos bien para hacer remakes de esas películas o para ofrecerles proyectos. Aquí sin embargo se estrenan tarde y mal, con pocas copias y campañas publicitarias demasiado limitadas de público (no es lo mismo que uno busque información de la peli y la encuentre en la red, a que mucha gente se trague, le interese o no, un anuncio en la tele).
En el caso de El Rey de la Montaña, además, la cosa parece especialmente sangrante. El argumento, de puro sencillo, no puede fallar, un tipo de viaje por una región montañosa es atacado por dos tiradores. A partir de ese instante una huída sin tregua digna de John Rambo en Acorralado. Una pelí, que visto el trailer que os traemos, promete ritmo trepidante, planos espectaculares y tensión constante. Además cuenta con actores conocidos y con renombre como Leonardo Sbaraglia y María Valverde. Si véis el trailer es de esas que veríais tarde o temprano, pero la veríais. En cambio, hasta casi un año después de su estreno en Sitges no la vamos a ver en cartelera (12 de Septiembre), y en Francia, de donde nos llega el trailer (y una web muy decente), se estrena esta misma semana.
Esperemos que Buena Vista, que es quien distribuirá la película aquí, sepa, aunque sea tarde sacarle el jugo a esta película de un tipo que promete mucho como es Gonzalo López-Gallego, al que no me extrañaría ver más pronto que tarde en USA dirigiendo algo.