Y es que si lo que dice Ain’t It Cool se confirma, la anunciada precuela de Soy Leyenda hace varias semanas podría finalmente convertirse en una continuación estricta a la peli protagonizada por Will Smith.
Spoilers!
El tema es que si habéis visto la peli, sabrés que el final deja poco margen de maniobra para que Smith esté presente. Morirse es lo que tiene. Cierto que el DVD tiene un final alternativo en el que eso no ocurre, con un componente más religioso o místico en plan “elegido”. Pero en cualquier caso no fue el final que se puso en cines y que casi todo el mundo conoce. Aunque claro, podrían decir que no murió, ya que no se le ve morir, y hacernos creer que después de estar rodeado de una horda de mutantes con instintos muy primarios dispuestos a devorarlo, prefirieron darle un abrazo y dejarle ir para continuar con sus proyectos de vida. O a lo mejor muere y resucita a los tres días, como Jesucristo. O quizás aprenda a adiestrar mutantes gracias a la ayuda de César Millán.
Me parece genial que quieran ver qué sucede después de eso, pero cuando las secuelas empiezan a funcionar a partir de hipótesis imposibles me cuesta mucho tragar con ellas, por muy bien hechas que estén y por muy buena que sea la peli. El punto de partida tan forzado ya te deja bastante distanciado del tema. Y la idea de la precuela me gustaba bastante más. Al menos es coherente, factible y permite ver cómo se originó todo en profundidad.
De todas formas esperaremos, ya que oficialmente sigue siendo una precuela lo que se prepara, y hasta que lo dicho por Ain’t It Cool se confirme, prefiero mantener la esperanza de que aún queda gente con cabeza en Hollywood.