“Lo dejo”, afirma George Lucas al diario The New York Times. “Me voy de este negocio, de esta compañía, de este rollo”. Su única cláusula de excepción será la hipotética quinta entrega de Indiana Jones. Hasta entonces, se puede decir que con Red Tails –la aventura bélica del escuadrón Tuskegee, conformado por pilotos de raza negra, durante la Segunda Guerra Mundial– cierra chiringuito.
Ah, Lucas no se olvida de los fanbois. “¿Por qué querría hacer más películas de Star Wars cuando todo el mundo te grita todo el rato y te dice lo mala persona que eres?”.
Lucas y su novia, Mellody Hobson
Volviendo a su retirada: el comportamiento del estudio con Red Tails ha colmado el vaso. Lucas se pagó de su bolsillo el presupuesto entero del film, dirigido por Anthony Hemingway y asegura que ningún ejecutivo acudió a los pases de la película. “No es como si llegara un chico del festival de Sundance y dijera, ‘Tengo esta peli…’ Es como si llega Steven Spielberg, o yo, o Jim Cameron… y les dicen que no quieren verla”.
El productor Rick McCallum, compañero de Lucas de toda la vida, lo corrobora: “Una vez termine (Red Tails) habrá hecho todo lo que quería hacer. Habrá completado su tarea como hombre y como cineasta”.
Y ahora llegan las citas:
– Sobre el aire retro de Red Tails: “Voy a hacer esta película para adolescentes negros. ‘¿Y no la haces en plan guai, con hip hop?, me preguntan desde el estudio. Y yo les contesto que no es lo más inteligente. Tienen todo el derecho a ver una película de Hollywood, al estilo grandilocuente y moñas de Hollywood. Es un film patriótico. Son aviadores negros que gritan ‘¡Chupate esa, Mr. Hitler!”
– Michael Bay, preguntado por el NYT, sobre el aire retro de Red Tails: “Lo hago yo y me mandan a la mierda”.
– Sobre los fanbois y los creadores de versiones fanbois de Star Wars: “Hay cosas más importantes en el mundo (que pelearse con ellos). Los mismos tipos que se quejan en Internet sobre los cambios puntuales que he hecho son los que están cambiando completamente la película. Estupendo. Pero mi película, con mi nombre, dice que la he hecho yo, y tiene que ser como yo quiero”.
– Sobre el frigorífico de Indiana Jones 4: “No es cierto (que la idea fuera de Spielberg). Está intentando protegerme. Spielberg no creía en esa escena. Pero las posibilidades de sobrevivir en ese frigorífico –y esto viene de muchos científicos– eran de un 50/50″.
– Sobre la figura del megadirector. “Para mí conforman algunos de los films más interesantes porque, incluso bajo las definiciones más estrictas de lo que se hacía en los 70, son films personales. Indiana Jones y el Templo Maldito fue un film muy personal: estaba atravesando un divorcio, y estaba de mal humor”.
– Steven Spielberg, sobre Star Wars y la ingenuidad: “La primera vez le dije a George: ‘Esta peli va a hacer 100 millones de dólares y te diré por qué, porque contiene una ingenuidad y una inocencia maravillosas, que forman parte de George, y la gente va a adorarlas”.