En un artículo publicado hoy en Variety se confirma que a Sony le faltan franquicias. En una época donde todo gran estudio recurre como salvavidas de su cuenta de resultados a una saga de superhéroes o similar (Universal se apoya en Bourne y F&F), a Sony se le acaban los cartuchos más allá de Bond y se marca un all in con Spider-Man. El periódico cinematográfico se hace eco de las intenciones del estudio de expandir el universo del hombre araña con la ya cacareada línea argumental de los Seis Siniestros y también con Venom. Pero es más, hay tan poco margen de maniobra que la intención es sacar una peli de Spidy al año.
Al parecer, los fiascos de After Earth y Asalto a la Casa Blanca han hecho cundir el pánico (que no el panico) debido a una cada vez más pobre cuenta de resultados. Mientras los estudios rivales se reparten el bacalao en Sony no han visto otra salida que deberse a la franquicia cuyo reboot recaudó casi 800 millones de dólares en todo el mundo y de la que se estrena la segunda parte en breve.
Marc Webb ya está fichado para dirigir la tercera entrega, pero la idea es que la cosa se acelere a partir de ese momento. Alex Kurtzman será el encargado de dirigir la película de Venom que coescribe junto a su compañero de toda la vida, Roberto Orci, y Ed Solomon. Drew Goddard, responsable de La Cabaña en el Bosque y Monstruoso, se está encargando del libreto de Los Seis Siniestros con una probable opción de dirigir también la película.
Las opciones alternativas son la mencionada saga Bond, que sigue manteniendo su tirón en base a una apuesta de calidad, y algo tan pobre como Los Pitufos, cuya tercera entrega ya está en desarrollo y que será íntegramente animada. En la cartera queda la probable adaptación de Gran Turismo, cuyos derechos son, obviamente, de Sony. Ahora que las franquicias de coches están en pleno relumbrón con el resurgir de A Todo Gas y la pintona Need for Speed a la vuelta de la esquina.
Vía Variety