Al poco de venirme a Madrid, hace quince años, tuve mi primer contacto con Jim Jarmusch con Ghost Dog, una película que me dejó bastante loco por la extraña mezcla de thriller, comedia negra y rollo autoral. Fue con una peli de Jarmusch la primera vez que fui al cine con mi primera pareja, aquella vez fue con Flores Rotas y sabía que me la jugaba porque si no eres muy cinéfilo Jarmusch puede entrarte torcido, su ritmo y humor son muy particulares. Pero funcionó genial. Sin ser uno de mis directores de cabecera y teniendo aún pelis pendientes, es alguien que nunca me ha decepcionado y que siempre me deja un regustillo especial, un director para disfrutar en una sala de cine pese a que no sea alguien entregado a la imagen y el espectáculo. Su cine es más de estado de ánimo, diálogos afinados y personajes singulares.
Ahora traslada su sello a un género tan aparentemente ajeno a su rollo como es el de vampiros. Algo similar a lo que pasaba con Ghost Dog. Y viendo la genial acogida que tuvo en el pasado festival de Sitges (donde se llevó el Gran Premio del Jurado y el Premio de la Crítica) y en Cannes hace un año, es de las películas de obligado visionado en cuanto llegue a nuestras salas el próximo 27 de Junio.
Aquí el tráiler en español: