Nueve ex empleadas de la compañía Zentropa, responsable de las producciones entre otros de Lars Von Trier, han denunciado al ex consejero delegado y fundador de la compañía Peter Aalbaek Jensen, de someterlas a actos de degradación sexual y abuso físico durante su estancia en la empresa.
Jensen, que creó la compañía junto al director danés en 1992, no solo no ha negado las acusaciones, sino que las ha justificado como parte de un proceso de aprendizaje en el marco de un programa llamado The Smaatte education, en la superficie el habitual curso en producción, postproducción y ventas, y que en realidad obligaba a las empleadas a realizar actos públicos de exhibicionismo con un fuerte componente sexual, tocamientos incluidos por parte de Jensen.
Entre los rituales descritos, destaca en particular un “festival de premios navideños” que se otorgaban a la empleada que más rápidamente se desvistiera, la empleada con el vello púbico más largo (medido delante de una audiencia), un juego de la ruleta con juguetes sexuales, pinzas para los pezones o vacunación de cerdos (no es coña).
A Jensen no solo se le acusa de organizar estos rituales sino de abusar físicamente de sus empleadas. “Manoseaba los pechos con asiduidad, gemía cuando te encontrabas al teléfono y pedía que te tumbaras en la mesa o en sus rodillas para recibir azotes”, según estos recuentos, recogidos por el diario danés Politiken.
Jensen también ha comparecido ante el periódico para justificar su comportamiento. Para empezar, reconoce que estas historias “probablemente ocurrieron”. “He ido demasiado lejos o he sobrepasado los límites en muchísimas ocasiones. Y lo defiendo por completo. Pero la cuestión se reduce a si eres un líder adorado o no lo eres. Y yo soy un líder adorado”, explica al diario. “Sí que voy a decir que no tengo interés alguno en la sumisión o en la degradación. Estoy interesado en probar los límites, especialmente dónde se encuentra la línea roja”.
El actual consejero delegado de la compañía, Anders Kjaerhauge, ha lamentado estas declaraciones “que no se corresponden con la Zentropa que conozco”, y se ha negado a comentar la documentación recabada por el Politiken, aunque se ha comprometido a realizar cambios en la empresa que Jensen todavía se está planteando aceptar. “Mis futuras acciones revelarán si decido aceptar o no la nueva política”, ha dicho el ex CEO antes de añadir, citado por el diario, que cree que no hay nada inherentemente malo en sus prácticas laborales.
Las autoridades laborales danesas han comenzado a investigar dichas prácticas. “Cuando tenemos noticia de relaciones (laborales) como esta, respondemos”, según explica el portavoz de la Autoridad del Entorno de Trabajo, Lars Toft Pedersen, en un correo a Deadline Hollywood Daily. “Tras la información que acaba de aparecer, comenzaremos a decidir la línea a seguir en este caso”.